martes, 24 de junio de 2008

El amor de Dios


El amor de Dios, es algo casi inexplicable, pues cuando tenemos nuestra vida cuadrada es cuando él nos llama y es que no nos sentimos bien si no es estando con él. Seré breve y espero que entiendan pues es casi imposible de entender es un amor muy completo y bello porque: es Frio pero caliente, Es fuerte pero Suave, es Doloroso pero Venda la herida, Es amargo pero mas Dulce que la miel de las abejas.
Así es el amor de mi Dios va de puerta en puerta, que te espera, te llama y que solo espera a que tu le contestes ¡Aquí estoy Señor! Es un amor que no hay palabras como explicarlo solo puedo sentirlo, es como una lagrima cayendo en el sonido del silencio, pero ese silencio no es desolación y oscuridad, ese silencio es Luz y Compañía, es Cristo que esta allí esperando por ti.

El activismo no es Amor:


Hermanos el activismo no es amor a Dios, pues debemos diferenciar entre el amor a Dios y el hacer cosas por hacerlas y pensar que la hacemos por Dios. Ejemplo de esto tenemos el evangelio de Marta y María. Marta preocupada por los oficios mientras que María estaba en la mejor parte, a los pies del Señor escuchando el mensaje de salvación.
En este sentido me refiero al activismo quizá Marta, por la preocupación de la casa dejo de escuchar a Jesús en cierto modo se puso en una modalidad de activismo, pues ella le pidió a Jesús que le dijera a María que la ayudara con sus quehaceres de la casa.
¿Quién somos, Marta o María? ¿Creemos que hacemos las cosas por Dios o estamos siendo activistas? Si eres Marta tomate un tiempo y dedícalo realmente a Dios por quien debemos hacer todas las cosas y si eres María sigue amando al Señor pero que estar a sus pies no sea excusa para tu pereza, ama y trabaja.

sábado, 21 de junio de 2008

Maria en mi Vida



María es la madre de Jesucristo, pero también nuestra, pues él nos la dejo cuando ella se encontraba al pie de la cruz. María en mi vida a sido precisamente eso una Madre. Les comento esto porque hay momentos en que nos olvidamos de ella, olvidamos hasta por completo a María pero ella de nosotros no. En ella he conseguido la calma en mis tardes y en mis noches pues al rezar el Ángelus o el Santo Rosario siento que ella me abraza.




Hermanos en María conseguí una fuerza de conversión que en mi no estaba, ella intercedió por mi ante su hijo y ten seguro que por ti también lo hace. Confiemos en Dios y en María pues ¿Que hijo no escucha a su madre? Y ¿Que madre no ama a su hijo? hasta en la madre más descuidada esta María. Amemos y veneremos a nuestra madre del cielo que ella no nos olvida y siempre ora y pide por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

viernes, 20 de junio de 2008

Dios es Amor.


Hola amigos del blog, esto es un artículo un poco personal pero que se los comento pues es un punto de vista sobre el amor de Dios:
El amor de Dios es algo inigualable, pues él nos regalo a si hijo y a pesar de nuestros errores él aun nos sigue perdonando y amándonos. Recuerdo como era antes de entrar al seminario, pero les digo que el Señor me regalo una prenda preciosa como es la vocación al Sacerdocio ministerial. Meditando en una Hora Santa me evaluaba sobre que había aprendido y les digo con toda sinceridad. HE CAMBIADO MUCHO. No soy el mismo de cuando entre a este hermoso proceso.
Aquí hermanitos se mide el amor de Dios, porque, él me llamo no siendo yo el más digno, esto es amor pues él no llama a los capacitados si no que capacita a los que llama. Jesucristo por medio de mis formadores me ha ido moldeando y eso es lo que debemos hacer moldarnos por él. Cuando el nos pregunte ¿Por qué pecaste? Podemos responderle: por que somos humanos y así con muchas cosas, pero cuando nos pregunte ¿Por qué no me amaste y no quisiste mi amor? Que le respondemos. No hay escusas pues Dios día a día nos regala su amor en un nuevo día, en los pájaros que cantan, en cualquier cosa. Dejémonos moldear por Dios el nos llama a algo en especifico, respondan al amor de Dios pues “DIOS ES AMOR” amémosle antes de que sea demasiado tarde.
Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aun pecadores, CRISTO murió por nosotros. Romanos 5:8